De todos oirás que no hay ser más loco que yo,
mas te digo, amigo mío, que nunca verás ser más cuerdo en este mundo.
Pues la lucidez de mi mente es la culpable,
quien lleva las riendas de esta vida errante.
Parece locura vivir sin dulzura,
mas la vida no es pura sino llena de amargura.
Si la miras de frente comprenderás
que de nada sirvió tu caminar.
Tu final es el mismo que el mío,
mas yo decidí no ser impío.
Con bravura, y sí, un poco de locura
llegué a la llana luna y allí comprendí
que nada fue de ti.
¿Mas qué fue de mí?
Si miro atrás nada comprendo,
Y delante, solo, sopla el viento.
Gélido, como una noche de invierno en la que sólo habla el viento
mas que dice, no lo sé.
Trato de entender,
pero no logro descifrar el mensaje que quiere dar.
Y entre gritos y agonía
descubro
vida mía
que nada fue real.
Vaya… no conocía esta faceta tuya. Seguiré el blog muy de cerca. xD
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La tenía por ahí escondida… ¡Espero que te guste! 😉
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